viernes, 1 de julio de 2011

Preocupados

La Fábrica está atravesando uno de los momentos más duros de su historia. La inactividad de varios Departamentos (Valores, Preimpresión…) se suma a la vejez de las líneas de negocio de Timbre, a los problemas de cuotas de producción de billetes en 2014 y a la falta de nuevas líneas de productos. Imprenta (mediante los documentos de identificación) y Ceres (certificación electrónica) son los principales graneros de facturación, pero también tienen problemas para cumplir los cada vez más exigentes requisitos de nuestros clientes y abordar nuevos proyectos.

Este panorama fue el que impulsó a algunos compañeros/as a promover la recogida de más de 800 firmas y exigir un horizonte de seguridad en las labores y por tanto en los puestos de trabajo. El Director convocó al Comité el 30 de junio para darle contestación, convencido de estar trabajando activamente por el futuro de la Fábrica.

El Director está muy orgulloso de haber logrado los acuerdos y encomiendas de los productos principales (billetes, documentos, lotería…) para los próximos tres años, y asegura que el respaldo político del Ministerio de Economía y Hacienda a la Fábrica es sólido. La mejor muestra de ello es que una parte de las tasas que se cobran por el DNI serán ingreso de la FNMT, lo cual implica un acuerdo ministerial de primera magnitud.


Respecto a la fabricación de billetes en 2014, además de informar de que el plazo contemplado actualmente para decidir la posible licitación se ha postergado a 2015 por decisión del Banco Central Europeo, aseguró que el Banco de España aun no había adoptado posición firme al respecto.

Según su criterio, que explica más ampliamente en un documento que hará público, son las labores de carácter de servicio público las que deben fundamentar la actividad de la Casa de la Moneda. En paralelo, argumentó la necesidad de proceder a reformas y cambios en el funcionamiento de la Fábrica, dentro del marco del Plan de Empresa, algunos de los cuales precisan modificar el Convenio. Dijo que estos cambios sólo se harán si hay consenso, en ningún caso por imposición, lo cual por otra parte es un requisito legal en muchos temas. Solicitó que se pusiera un calendario de reuniones y afirmó que antes de final de año tendríamos una contrapropuesta respecto al Plan de Empresa.

No obstante, reconoció que todavía no había conseguido de la CECIR aprobación ni presupuesto para una de sus propuestas estrella, la retribución variable por objetivos (sumable a la fija actual).

Manifestó su molestia por las decisiones del Comité en el asunto de las medallas de los premios de antigüedad (seguir recibiéndolas en las mismas condiciones de siempre); la no firma del protocolo de absorción de la Fundación (que no precisa de ratificación por el Comité), y las Titulaciones. Según ellos, permitir que se puedan presentar más titulados en los procesos de selección llevaría a que hubiera más plazas desiertas.

El Comité reiteró su preocupación ante la incertidumbre de trabajos importantes, le recordó que prácticamente a diario se están haciendo propuestas para mejorar la Fábrica, y que el Plan de Empresa parece paralizado por la Dirección, sin entender que haya que esperar a fin de año si se considera tan necesario.

EPS opina que todas las propuestas del Plan de Empresa deben ser discutidas en un plazo razonable para poner en marcha las que proceda sin tener que llegar a una situación de crisis. Es evidente para la mayoría de la plantilla que hay muchas cosas que arreglar en la Fábrica –tanto en lo social como en la organización del trabajo- para afrontar con garantía los tiempos que vivimos.

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