La división de empresas y actividades que quiere hacer la dirección pone en riesgo nuestros puestos de trabajo. Ni la nueva Valores tiene recursos suficientes, ni la nueva FNMT-RCM tiene trabajo para quién quede.
Tenemos que pensar en 2018, no en el periodo transitorio, en que mal que bien las cosas se pueden ir sobrellevando.
¿Estará la nueva Valores dotada de todos los medios humanos y técnicos para hacer sus funciones? ¿Tendrán todos los trabajadores/as que queden en la FNMT-RCM carga de trabajo efectiva? Tal como se está diseñando la división entre ambas empresas, EPS opina que no, y eso significa que habrá problemas con los puestos de trabajo.
En el documento “Impacto en la FNMT de la segregación de billetes Euro”, suscrito por el Comité Intercentros en Marzo de 2014, se estimaba que 71 personas, de fuera del Departamento de Valores, trabajan para la Fabricación de Billetes en el resto de la Fábrica, sin contar Burgos ni contratas. Estamos hablando de Preimpresión, Calidad, Mantenimiento General, Laboratorio, I+d+i, Servicios Administrativos, Seguridad. ¿Qué va a pasar con ellas en 2018?
EPS comparte la opinión de un compañero de Preimpresión: en la nueva Valores va a ser necesario contratar gente o subcontratar servicios, y en la Fábrica van a sobrar. ¿Es este el futuro que queremos?
La plantilla de la estructura común que no se transfiere a la nueva Valores va a generar un sobre coste difícil de absorber por los productos que facturan (incluido Ceres), pudiendo provocar pérdidas en los departamentos más débiles (p.e. Timbre o Burgos). Si a esto le añadimos la nueva valoración de puestos de trabajo, con una clara tendencia a los grupos profesionales y a la polivalencia, y la falta de un plan estratégico y de perspectivas de nuevas actividades en Fábrica, es demasiado probable un escenario de pérdidas+excedentes.
Es decir, lo que cualquier gestor neoliberal estaría deseando para privatizar la Fábrica.
Ante el riesgo inminente para la continuidad de la empresa y los puestos de trabajo, la segunda acción que hemos que emprender l@s trabajador@s (la primera es oponernos a la segregación apoyando la demanda contra ella) es conseguir que el reparto de la plantilla sea proporcional al trabajo que a ambas empresas les corresponda realizar.
Y esto significa que alrededor del 20% de la estructura común debe trasladarse a la nueva Valores. Por el bien de tod@s.
No queremos una Fábrica con gente parada en 2018, ni queremos un nuevo Valores subcontratando al exterior. Quien quiera hacer esa partición tendrá que explicar sus razones y sus intereses.
Tenemos que pensar en 2018, no en el periodo transitorio, en que mal que bien las cosas se pueden ir sobrellevando.
¿Estará la nueva Valores dotada de todos los medios humanos y técnicos para hacer sus funciones? ¿Tendrán todos los trabajadores/as que queden en la FNMT-RCM carga de trabajo efectiva? Tal como se está diseñando la división entre ambas empresas, EPS opina que no, y eso significa que habrá problemas con los puestos de trabajo.
En el documento “Impacto en la FNMT de la segregación de billetes Euro”, suscrito por el Comité Intercentros en Marzo de 2014, se estimaba que 71 personas, de fuera del Departamento de Valores, trabajan para la Fabricación de Billetes en el resto de la Fábrica, sin contar Burgos ni contratas. Estamos hablando de Preimpresión, Calidad, Mantenimiento General, Laboratorio, I+d+i, Servicios Administrativos, Seguridad. ¿Qué va a pasar con ellas en 2018?
EPS comparte la opinión de un compañero de Preimpresión: en la nueva Valores va a ser necesario contratar gente o subcontratar servicios, y en la Fábrica van a sobrar. ¿Es este el futuro que queremos?
La plantilla de la estructura común que no se transfiere a la nueva Valores va a generar un sobre coste difícil de absorber por los productos que facturan (incluido Ceres), pudiendo provocar pérdidas en los departamentos más débiles (p.e. Timbre o Burgos). Si a esto le añadimos la nueva valoración de puestos de trabajo, con una clara tendencia a los grupos profesionales y a la polivalencia, y la falta de un plan estratégico y de perspectivas de nuevas actividades en Fábrica, es demasiado probable un escenario de pérdidas+excedentes.
Es decir, lo que cualquier gestor neoliberal estaría deseando para privatizar la Fábrica.
Ante el riesgo inminente para la continuidad de la empresa y los puestos de trabajo, la segunda acción que hemos que emprender l@s trabajador@s (la primera es oponernos a la segregación apoyando la demanda contra ella) es conseguir que el reparto de la plantilla sea proporcional al trabajo que a ambas empresas les corresponda realizar.
Y esto significa que alrededor del 20% de la estructura común debe trasladarse a la nueva Valores. Por el bien de tod@s.
No queremos una Fábrica con gente parada en 2018, ni queremos un nuevo Valores subcontratando al exterior. Quien quiera hacer esa partición tendrá que explicar sus razones y sus intereses.
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BBVA - 0182 4001 09 0201578602
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